Portillo Beatriz, Vera Lerynisis, Crespo Jeffry
INTRODUCCIÓN
La Educación atenta a la emprendedora
laboral académica, formativa, cultural para la sociedad como su fin primordial,
se afana a dar resultados de aprendizaje de calidad, siempre y cuando aproveche
su fundamentación teórica y práctica en los aportes que le ofrece la
Neurociencia, la misma es fuente de estudio completo de los seres humanos que
les dé a éstos herramientas de uso de sus potencialidades y habilidades desde
su desarrollo cognitivo y holístico para su propio beneficio, ser promotora del
respeto a la vida y su convivencia desde su ser social.
Es
necesario el tiempo de reflexión, análisis y discusión en mesas de trabajo con
la siguiente interpelación: ¿Cómo se aprende?, ¿Cómo se enseña?, ¿Qué se debe
aprender?, ¿Para qué sirve el aprendizaje que recibe o se le aporta a los discentes?,
¿Cuáles son los mecanismo neuronales subyacentes en la cognición y en la
conducta?, ¿Cómo han sido los cambios de conductas que se ha obtenido por la
enseñanza que se ha dado? ¿Cómo enseñar valores aplicados para erradicar tanta
violencia observada en la sociedad venezolana y/o mundial? Basándose el personal Docente en la psicología
pura, generada por las teorías de J. Piaget, S. Freud,
B. Skinner, W. James, J. Watson,
I. Pavlo, entre otros.
Por las mismas, estas teorías de aportes
de científicos en Psicología, Sociología, Antropología, Neurología, Teología,
Filosofía (Ciencias que se unen para hacer de la Neurociencia la
Multidisciplinaridad una herramienta para la Educación) que fortalecen las
disciplinas útiles para el campo educativo, facilitando a los Docentes entender
los cinco (5) Principios del Saber (ser, estar, hacer, conocer y convivir),
como la situación y forma de Conducta tanto de los Discentes como la de ellos
mismos y la de sus colegas en el ámbito educativo, que genere fortaleza espiritual
y social para convivir en bien común, con la cultura de paz, de productividad
que tanto necesita el país, con personas que se sientan y actúen de forma
positiva o con dignidad.
LA
NEUROCIENCIA PARA LA ACTUAL CRISIS DE VALORES.
La Educación a través del tiempo de su
acción como servidora público es portadora de los principios del saber, siendo mediadora,
educadora, orientadora, formadora de la humanidad para que esta alcance los
saberes del conocimiento; con todas las disciplinas del orden académico y
componentes valorativos para fomentar el desarrollo cognitivo del ser humano,
la cual se puede fundamentar teóricamente desde la implementación de los aporte
que ofrece la Neurociencia, por ser esta el conjunto de disciplinas cargadas de
Conocimiento desde el punto focal donde se ha de dar el crecimiento corporal,
mental y espiritual del individuo desde el plano personal y social, generándole
sentirse realizado y feliz.
Es por ello que los educadores para
mejorar su desempeño laborar en los Centros del Saber, han de poseer el Conocimiento
estratégico que aporta la Neurociencia, la cual estudia la Estructura y la Función
química, Farmacológica y Patológica del Sistema Nervioso, de cada ser humano,
(sus estudiantes) para que éstos luego lo apliquen en sus hogares, como seres
multiplicadores de las enseñanzas recibidas; teorías que comprenden: Cerebro
Triuno, Inteligencia Múltiple, la Programación Neurolingüística (P.N.L), entre
otras; para formar seres integrales y generar la calidad educativa que pueda
erradicar conflictos de orden social, económico, espiritual, político y
ambiental, sustentados en valores éticos y espirituales.
Para ello, se ha de dar cierto tiempo de
análisis, reflexión de lecturas comprensivas de fuentes teóricas,
conversatorios, entre otras estrategias metodológicas necesarias para reconocer
que la Neurociencia aplicada a la Educación es observada como una fortaleza, ya
que es una disciplina que examina los procesos neuronales que llevan a cabo
cuando los estudiantes están memorizando contenidos que le generan aprendizaje
significativo, valoración conductual; pudiendo evaluar sus rasgos personales
característicos de sus acciones habituales, tales como: Perseverante en la
realización de tareas o responsabilidades, Amable con sus iguales al momento de
comunicarse, Pulcro en su vestir y en su hacer (Trabajos).
Así mismo, el aprendizaje de valorar los
lugares (saber estar) donde convive con sus iguales con sentido de pertenencia,
se puede observar también si los estudiantes muestran actitudes de Libertad en
el momento de tomar decisiones personales y colectivas, tomando en cuenta que
es verdaderamente libre en la manifestación de sus emociones, el respeto a la
opinión ajena y diferencias o diversidad social.
Entre
otras características observables esta la autoestima- autoimagen y autoconcepto
que genera no sólo bienestar personal sino colectivo, porque al valorarse así
mismo apreciara a los demás como baluarte espiritual y herramienta para contrarrestar
la negatividad de vivencia de antivalores que corrompen su naturaleza y su
entorno, que desvirtúa el objetivo último de la Educación: Formar a la Sociedad
para que todos sus miembros sean felices, tengan una vida digna y estable, en
consecuencia sus creencias o pensamientos con sus acciones.
Al conocer el Educador la función del
Cerebro (aportes de la Neurociencia) de cada uno de sus estudiantes, le
permitirá generar el uso de estrategias metodológicas y didácticas para que sus
clases pedagógicas y lúdicas sean más
efectivas, innovadoras, dinámicas, aprovechables para que éstos alcancen el
desarrollo máximo de sus capacidades, habilidades y potencialidades. Para que
estén claros en su forma de ser como personas: introvertidas o sociables,
optimistas o pesimistas, arriesgadas o timoratas, simpáticas o reprimidas,
extrovertidas o tímidas, pudiendo tener efectos en su vida, es decir, como Docentes
ofrecerles a los discentes herramientas accesibles para mejorar sus acciones a
nivel positivo para su bien social.
NEUROCIENCIA
ESTUDIO DE CONDUCTAS: CREENCIAS ESPIRITUALES Vs. CONDUCTA ACTUAL (ACCIONES
COTIDIANAS LLENAS DE VALORES Y ANTIVALORES).
Es probable que nadie se oponga a la
siguiente frase: “El ser humano cree en Dios, pero no cree en Él”, saben que
existe, hasta dicen que lo aman y en varios casos se les observa adorarlo en
sus templos… le oran cuando viven situaciones de dolor, de desamparo o cuando se
encuentran compungidos y confundidos. Una frase con sentido filosófico: es el
Saber del ser humano de la existencia de Dios, saben que vive entre ellos, pero
no lo saben cerca, no se fían en Él al no esperar que actué. Saben (las
personas) en su interior (mente) que es Todopoderoso, Creador del Cielo y de la
Tierra, Dador de vida, Sabiduría, entre otras características de su existencia
divina, pero en su exterior (conducta) es sustentada en antivalores .
Así mismo, dicen creer en Dios, pero no
creen en ÉL… ya pareciera que las palabras no son congruentes con las acciones
o conductas en algunas personas, porque lo creen lejano, no se confía en Él,
cree en Él pero no saben que está con ellos, esto es conmensurable cuando las
personas demuestran que su conducta es incongruente al modo de ser de Dios, ya
que se manifiesta de un modo contrario a cómo deben ser los creyentes o mostrar
condescendencia a lo que aprenden de este Maestro a quien siguen, con características
visibles: Bueno, Misericordioso, Paciente, entre otras; mientras que se les
puede observar (a las personas) que son evaluables de seres egoístas,
intolerantes, impacientes, envidiosos, infelices, entre otros…
Si de verdad el ser humano creyera en Él,
en su Divina y Trina Presencia, actuaria de una forma acorde a la del ser de
Dios en quien cree. Que aprende a conocerlo tanto en la Familia como en la Escuela,
¿quién es y cómo es?, el cual es digno de imitar viviendo en valores éticos-
morales y ciudadanos. El Misterio de Su existencia entre los seres humanos,
interpretado (analizado, orado, meditado- contemplado) por Teólogos de la Iglesia Católica, tales
como: Fr. Carlos Bazarra, Sj. José Trigo, Sj. Ignacio Larrañaga, Padre. Gonzalo
Gallo, entre otros pensadores modernos; señalan que Dios Hijo, se hizo humano
para dar ejemplo de vida en valores, enseña Dios humano, que se puede ser
amable, tolerante, solidario con los otros.
Los investigadores de la Neurociencia en
su tarea de comprender la mente humana para buscar solución a la crisis de
valores, y evitar el posible estallido social en Venezuela, han llegado a
ofrecer terapias de análisis y corrección de conductas negativas; basándose en
teoría propuestas tales como la del Padre. Gonzalo Gallo (2009): “la emoción
nace en la mente, se refleja en el cuerpo y eso permite identificarla y
manejarla. Sentir su campo de energía interna y en el silencio del yo interior,
preguntarse con frecuencia: ¿Qué pasa dentro de mí en este momento? ¿Qué
consecuencias tendré según como actué, como serán mis emociones o sentimientos?”.
El ser humano obtiene poder mental y corporal bajo la influencia de sus
creencias en Dios porque saben que Él existe.
En la sociedad venezolana, se ha observado
en estas últimas décadas, la vivencia de antivalores (indolente y sin temor a
la trascendencia humana- divina), quien demanda a la Educación una
transformación profunda, ya no es suficiente cambiar planes de estudios a
través de Reformas Educativas o Curriculares, ya no sirven las reflexiones estériles.
Los Centros del Saber Venezolanos en todos sus Niveles, deben brindar aportes y
soluciones que exigen un nuevo marco referencial tocando sus bases espirituales
(¿En quién cree?) y los marcadores clínicos que dan los estudios de la
Neurociencia. Es decir, que los Educadores sean personas de vida ejemplar, ya
basta de palabras vacías, ser fuentes de valores éticos, morales y ciudadanos.
Actualmente a los educadores se les recomienda
volver a su mística vida de portadores de valores, creyentes en Dios (confiando
en Él) y en la Sociedad a quien sirven, confiando desde su palabra y su
práctica laboral. Don Simón Rodríguez, dejo escrito en la historia de su vida
educativa para bien social: “Educa al niño de hoy, para no castigar al hombre
de mañana”, es decir, dar ejemplo con la propia vida, mostrar conducta de
dominio emocional, ya basta de palabras vacías, y violencia interrelacionar
vistas en las Instituciones, y de ella la Sociedad; creer en Dios exige a los
docentes actuar como Él, darían ejemplo de luchar contra los antivalores que
pueden estar germinando en su interior, como lo teoriza el Padre Gonzalo Gallo.
Ya basta de incongruencia entre pensar y
actuar. De no interiorizar las verdades divinas hasta las grandes profundidades
del ser ético- moral- ciudadano del que está hecho el ser humano, y aplique en
sus acciones una vida acorde a sus creencias en su Maestro. Si de verdad el
Docente creyera en Dios, en su Divina Presencia, sería como Él, actuaria de
modo acorde a la forma de ser de Él, es decir, según el Padre Carlos Bazarra
Dios es conocido como Bueno, Misericordioso, Amoroso, Compasivo, Respetuoso,
Dador de vida, lento al enojo, rápido en Bondad y Comprensión, entre otras
características de su Presencia, que para el ser humano le generaría calidad de
vida, plasmándoles su inmensa espiritualidad y amor al prójimo.
El creer en Dios viviendo sus valores, revertiría
las acciones de antivalores que sufre actualmente la sociedad. El ser humano
sería feliz, exitoso porque genera bien común, creería en si mismo y en sus
iguales (familia, amigos, compañeros, vecinos), les manifestaría amor, respeto
a sus diferencias. Sabría luchar contra la actual crisis de valores evitando el
estallido social que se avecina según argumentan los críticos en
sociología, economía y política.
Creer en Dios y en el Ser Humano (en si
mismo y en sus iguales), que disyuntiva esta, que fomenta buscar tiempo de
reflexión, análisis y crítica constructiva, para reconocer los aportes de la
Neurociencia como disciplina capaz de dejarnos ver la complejidad de la mente,
en relación intrínsica con lo espiritual y corporal del ser humano que le ayude
a crecer y desarrollar sus facultades, habilidades y talentos… La misma da a
los educadores el saber ayudar a los estudiantes a descifrar su
potencial desde su complejo estado de la psique para que sus creencias,
costumbres y maneras de actuar en convivencia social sea en valores y en
disminución de los antivalores que lo cobijan para que este en constante lucha
del bien contra el mal.
Fuente
Bibliográfica
Bazarra,
C. (2005). Un país de Valores. Sociedad de San Pablo. Ediciones Paulinas. Caracas-
Venezuela.
Bazarra,
C. (2008). El Perdón, “hasta setenta veces siete”. Sociedad de San Pablo. Ediciones
Paulinas. Caracas- Venezuela.
Barra, R. (2006). Educación en valores: La vida, la escuela, el
sentimiento, en
Educación y valores. Boiero De Angelo,
M. Río Cuarto. Fundación UNRC.
Codina, A. (2009). Manejo de conflictos. Para una dirección efectiva.
Disponible desde:
http://www.gestiopolis.com/canales7/rrhh/manejo-de-conflictos-para-una-direccion-efectiva.htm
Gallo,
G. (2011). Crecer en crisis. Sociedad de San Pablo. Ediciones Paulinas.
Colombia.
Gallo,
G. (2008). El sentido de la vida. 3era edición. Sociedad de San Pablo. Ediciones
Paulinas. Colombia.
Pérez
Esclarín A. Aprender a Convivir. Artículo Diario La Verdad. Lunes 27 de mayo de
2013. Maracaibo- Venezuela.
Recomendados
·
Blog: Pensamientos de Gonzalo
Gallo- ERES FELIZ CUANDO ESTAS... enpazyarmonia.blogspot.com/
·
Libro: Autoliberación Interior, de Anthony de Mello.
Sociedad de San Pablo. Ediciones Paulinas. Caracas- Venezuela.
·
Libro: G. Gallo G. Oraciones
Poderosas y páginas selectas de la Biblia – 2008. Sociedad de San Pablo. Ediciones
Paulinas. Caracas- Venezuela.
No hay comentarios:
Publicar un comentario